Ludovic y Zoran Boukherma presentan una obra de gran belleza con Leurs enfants après eux, inspirada en la novela de Nicolas Mathieu, ganadora del Premio Goncourt en 2018 y publicada por las ediciones Acte Sud. Los realizadores de Teddy y L’Année du requin consolidan su talento al explorar con profundidad la vida en la provincia francesa. Esta historia, centrada en un trío de jóvenes interpretados por los brillantes Paul Kircher, galardonado en Venecia, Angelina Woreth y Sayyid El Alami, revive el noreste de Francia en 1992.
Esta cautivadora crónica, dividida en cuatro partes que abarcan seis años, sigue la evolución de los adolescentes y también de algunos de sus padres, encarnados principalmente por Ludivine Sagnier y Gilles Lellouche. La fuerza emocional de la película evoca inevitablemente L’Amour ouf. Lejos de desestimar esta comparación, los hermanos Boukherma aceptaron hablar al respecto en una entrevista con 20 Minutes, respondiendo al unísono como el dúo inseparable que son.
¿Cómo comenzó su colaboración con Gilles Lellouche?
Él fue quien se acercó a nosotros. Inicialmente, planeábamos adaptar la novela juntos para hacer una serie, pero Gilles se ocupó con L’Amour ouf y nos dimos cuenta de que el libro nos había cautivado profundamente. Para nosotros, fue algo natural continuar trabajando en ello.
¿Por qué esta historia les conmovió tanto?
Venimos de un entorno popular y rural, lo que nos permitió conectar con las inquietudes de los personajes principales: Anthony, Hacine y Steph. Nos vimos reflejados en los tres. Crecimos en un ambiente social modesto, similar al de Anthony. Además, nuestro apellido, Boukherma, nos hizo identificarnos con Hacine, ya que, cuando éramos jóvenes, sentíamos cierta vergüenza por nuestro nombre. Por otro lado, nos sentimos cercanos a Steph, quien, como nosotros, dejó su lugar de origen para ir a París y perseguir su sueño de hacer cine.
¿Por qué eligieron a Gilles Lellouche para interpretar al padre del protagonista?
Aunque Gilles nos contactó inicialmente para la escritura, nunca mencionó que quería interpretar ese papel. Sin embargo, desde el primer momento que leímos el libro, lo imaginamos en el personaje. Cuando se lo propusimos, aceptó de inmediato. Venía de dirigir L’Amour ouf, y fue muy generoso con nosotros. Es un actor carismático, y nos pareció interesante darle un papel que evoluciona de manera compleja: un hombre violento que representa una idea rígida de la masculinidad y que, con el tiempo, se desmorona.
¿Es fácil dirigir a Gilles Lellouche?
Con Gilles, todo gira en torno a la confianza. Una vez que te la otorga, se deja llevar completamente. Se nota que reflexiona mucho y que cuestiona todo de manera constante, pero nunca en detrimento del proyecto. Su experiencia como director no lo hace autoritario en los rodajes de otros. Comprendió perfectamente a este personaje, un hombre que ama de manera defectuosa a quienes más quiere y paga un alto precio por ello.
¿Temen que el éxito de L’Amour ouf opaque el estreno de su película?
Es cierto que ambas películas tienen similitudes y comparten los mismos productores. Las dos son grandes sagas familiares adaptadas de novelas. Sin embargo, esperamos que el éxito del filme de Gilles impulse el nuestro. El público de L’Amour ouf también podría disfrutar de Leurs enfants après eux. Sería maravilloso que nuestra película tomara el relevo una vez que la de Gilles haya agotado su recorrido en los cines.
